Intentaban pasar el mayor tiempo juntos, pero todo les parecía poco, ella estaba enamorada, él estaba enamorado, ambos lo estaban, de tal manera que no podían respirar el uno sin el otro.
Llegó el día, se fue, prometiendo que la amaría siempre y que nunca se olvidaría de ella. Ella no tuvo palabras para decirle intentaba hablar pero no vocalizaba ninguna palabra coherente, solo pudo abrazarle y besarle como no le había besado antes.
Pasaron años, no se olvidaron, se siguieron amando, tuvieron amores pasajeros, se casaron, tuvieron hijos y nietos.
Pero un día se volvieron a encontrar, ambos estaban solos y sí, quedaba mucho de aquel amor que habían vivido en su juventud. Permanecieron juntos y enamorados hasta que murieron, también juntos. Fue un amor eterno.
Cosas así te dan ganas de vivir.
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